Nunca es demasiado temprano para iniciar a tu pequeño hijo a las alegrías de la lectura. El libro es un objeto curioso y mágico para un niño, le permite explorar mundos maravillosos y aprender a través de las experiencias que se describen allí.
Motiva a tu hijo a leer a una edad temprana
Cultivar el amor por la lectura de tu hijo estimulará sus habilidades cognitivas, como la concentración, la escucha o la mente analítica. Sin embargo, es importante hacer de la lectura un momento de placer y descubrimiento y no un deber.
Elige el libro correcto
El libro que elijas hará toda la diferencia en el interés y el placer que sentirá tu hijo al leer. La mejor idea es escoger libros con colores brillantes y múltiples texturas, que un niño pueda manejar fácilmente. Si el niño tiene menos de dos años, son preferibles los libros repetitivos con muchas rimas para facilitar la comprensión.
Libera al payaso dentro de ti
Leerle a tu niño pequeño es la excusa perfecta para desatar tu creatividad interior y el comediante dentro de ti. Sí, puede sonar tonto, pero su entretenimiento también depende de la forma en que lo lea. Las voces divertidas, los sonidos de animales y los rostros te ayudaran a conseguir su atención.
Toma buenos hábitos
Cuanto más le leas cuentos a tu hijo, más aprenderá. Intenta disfrutarlo y no verlo como una tarea. También es un momento que te permite sentarte y relajarte 5 min.
La lectura no debe hacerse en momentos específicos, si tu pequeño está demasiado cansado por la noche, léele un cuento después del almuerzo o antes de bañarse, por ejemplo. También usa las historias para ayudar al niño a calmarse o a distraerse durante una rabieta.
Enamóralo de la biblioteca
Una vez que sea mayor, deja que tu niño elija sus propios libros. Es una parte importante del desarrollo de su amor por la lectura. Regístralo en la biblioteca más cercana, es gratis para los niños, y encontrará una amplia gama de opciones.
Además de ser una actividad entretenida, la biblioteca te permitirá conocer a otros padres y compartir consejos y algunas buenas ideas.
Dificultades para la lectura
Si crees que tu hijo tiene dificultades para aprender, habla primero con su maestro y, si es necesario, consulta a tu médico de familia. Estos son algunos síntomas que indican si un niño tiene dificultades para leer:
- Apenas reconoce letras y palabras.
- No puede asociar una letra con un sonido.
- No sigue bien el hilo de una historia.
- No hace una conexión entre una historia y su propia experiencia.
- Presta poca atención cuando lees una historia en voz alta.
- No puede escribir su nombre.
También es posible que tu hijo tenga problemas visuales, auditivos o neurológicos, como la dislexia (lo que causa dificultades para distinguir las letras).
Si este es el caso, es mejor que la evaluación sea realizada por un profesional tan pronto como sea posible para que se implementen los medios para ayudar al niño en su aprendizaje.
