Todos tenemos una personalidad propia. Algunas personas son más sociables, otras introvertidas… pero hay quienes sufren cada vez que deben enfrentarse a una situación social. Conoce qué es una fobia social, cuando no eres tímida, solo te es difícil convivir.
Solemos dividir a las personas en dos grupos: los extrovertidos que disfrutan las reuniones sociales, salir y conocer gente… y los introvertidos, más retraídos, tímidos y quienes se juntan con pocas personas. Pero pocas veces pensamos que detrás de alguien que se aísla o resiste a convivir hay algo más que ser “sangrón”.
¿Qué es una fobia social?
La fobia social, médicamente conocida como trastorno de ansiedad social, es un tipo de trastorno de ansiedad donde las personas presentan síntomas de ansiedad o miedo en ciertas o todas las situaciones sociales: desde conocer personas nuevas, hasta tener una entrevista de trabajo o responder preguntas en clase.
La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, la describe como un miedo persistente e irracional ante situaciones donde quien la padece siente que será juzgado. Esta condición puede comenzar en la adolescencia y afecta a hombres y mujeres por igual.
Según los especialistas, interfiere en todo tipo de situaciones sociales, incluso en aquellas que parecen cotidianas, como interactuar con un cajero en algún establecimiento, comer delante de otros o usar un baño público, pues el miedo a ser humillados, juzgados y rechazados, prevalece.
Aunque para el resto parece algo sencillo de superar, quienes viven con este trastorno sienten un temor tan fuerte, que no se sienten capaces de controlarlo, por lo que se interpone en su capacidad para realizar diferentes actividades, incluso provoca el vivir preocupado por situaciones antes de que ocurran.
Sin embargo, uno de los mayores problemas asociados a este trastorno, es el alto riesgo de consumir alcohol u otras drogas, al considerarlo relajantes en situaciones sociales.
¿Por qué da ansiedad social?
Existen diferentes causas que se han asociado al trastorno de ansiedad social. Según especialistas, en ocasiones puede ser hereditario; de igual modo, han encontrado que el temor y la ansiedad involucran diferentes partes del cerebro.
Otros factores que pueden generar o empeorar la ansiedad social, de acuerdo a los National Institutes of Health, son:
* Una mala interpretación de la conducta ajena, como pensar que te están mirando, aunque no sea así
* No tener las habilidades sociales bien desarrolladas
* Padres sobreprotectores u oportunidades sociales limitadas
* El estrés y los factores ambientales
¿Cuáles son los síntomas de ansiedad social?
La mayoría nos hemos sentido incómodos en algunas situaciones sociales, asimismo, hay personas más tímidas, mas no siempre es una señal de ansiedad. Pero cuando se convierte en algo intenso que te sobrepasa y hay miedo, ansiedad y evasión que interfieren con tu vida, no debe ignorarse.
Los especialistas de Mayo Clinic, explican que los síntomas del trastorno de ansiedad social se manifiestan como la persistencia de:
* Temor a situaciones donde podrías ser juzgado
* Angustia por sentirte avergonzado o humillado
* Temor intenso de interactuar o hablar con extraños
* Temor a que noten que estás ansioso
* Dejar de lado algunas actividades o dejar de hablar con algunas personas
* Evitar situaciones donde seas el centro de atención
* Ansiedad en momentos previos a una situación que te da miedo
* Miedo intenso o ansiedad en situaciones sociales
* Analizar cómo actuaste en una situación social e identificar las fallas
* Esperar lo peor de una experiencia negativa
* Síntomas físicos como: enrojecimiento, latidos rápidos, temblores, sudoración, malestar estomacal o náuseas, dificultad para respirar, mareos o aturdimiento, sensación de tener la mente en blanco, tensión muscular
Todo esto puede derivar en que no sólo te cueste interactuar con personas desconocidas, también te resistes o sufres si tienes que: asistir a fiestas o reuniones sociales, hacer contacto visual, una cita romántica, entrar en una habitación con otros sentados, devolver algo en una tienda, incluso ir al trabajo o la escuela.
Algo que debes tomar en cuenta, es que los síntomas pueden cambiar con el tiempo y aumentar frente a momentos de estrés. Incluso si evitas las situaciones para no sentir ansiedad, esta puede aumentar, por lo que es indispensable tratarla.
De no tratarlo, el trastorno de ansiedad social puede volverse un problema que controle tu vida e interfiera con aspectos laborales y personales, impidiéndote disfrutar. Asimismo, en ocasiones deriva en abusos de sustancias e incluso intentos de suicidio.
¿Cómo tratar el trastorno de ansiedad social?
Si las situaciones sociales te paralizan y provocan síntomas de ansiedad, es importante que platiques con tu médico, a través de un examen sobre tu historia y comportamiento, podrá confirmar el diagnóstico y dar un tratamiento.
Este suele consistir en psicoterapia con terapia cognitivo-conductual, con el objetivo de enseñar otras formas de pensar, comportarse y reaccionar ante distintas situaciones, para así reducir la ansiedad o temor.
Asimismo, pueden recetarse medicamentos como los ansiolíticos, antidepresivos y betabloqueadores, los cuales deben tomarse de acuerdo a las indicaciones de tu médico. La mayoría no pueden dejarse sin indicación médica.
Finalmente, los grupos de apoyo también pueden ser de ayuda, al igual que llevar un estilo de vida saludable y aprender formas de controlar el estrés.
Lamentablemente, no es posible predecir ni evitar un trastorno de ansiedad. Sin embargo, pedir ayuda en cuanto manifiestes síntomas y evitar el consumo de sustancias no saludables, es fundamental para atacar el problema desde sus inicios.
Ahora que ya sabes lo que es una fobia social o trastorno de ansiedad social y que no solo eres tímida o “antisocial”, busca ayuda para evitar que el problema aumente e interfiera con tu calidad de vida.
