El día 22 de junio se celebra el “Día Mundial de llevar el perro al trabajo” (Take your dog to work day), una idea que surgió en EEUU y que se ha extendido por la mayoría de territorios del planeta como una forma de compartir tanto la vida familiar como la vida laboral con nuestros queridos no racionales.
La presencia de los animales domésticos, del perro más concretamente, forma parte, cada vez más, de colegios, hospitales, geriátricos, centros penitenciarios… y lugares de trabajo.
No son pocas las empresas de diversos ámbitos que consideran positiva la convivencia con los perros de los empleados, tanto para aquellos que conviven con su animal, como con aquellos que nunca se lo han planteado.
Intentaremos ver cuáles son los principales beneficios que puede aportar la presencia de no racionales, compañeros de vida de los racionales, en sus lugares de trabajo, pero como pincelada diremos que existe un amplio consenso en que entre las aportaciones más evidentes para los humanos son la reducción de la ansiedad y el aumento del bienestar.