Las personas que prefieren quedarse despiertas hasta tarde tienen el doble de probabilidades de bajar su rendimiento en el trabajo en relación con aquellos que son más madrugadores, tal y como informa un nuevo estudio finlandés. Y es que aquellos que comienzan su jornada laboral más temprano suelen ser más productivos, puesto que la exposición a la luz del día juega un papel muy importante en el desarrollo de las tareas profesionales y personales.
Para llegar a esta conclusión, los investigadores preguntaron a un total de 5.881 personas nacidas en Finlandia en 1966 sobre su vida laboral, salud y patrones de sueño, para descubrir cuál era su caso en 2012, momento en que todos tenían 46. Durante el estudio, que tuvo una duración de cuatro años, los participantes fueron monitoreados, informa CNN.
Suzanne Hood aconseja a las personas nocturnas que no se alarmen ante los resultados
El proceso arrojó que el 10% de los hombres y el 12% de las mujeres eran “tipos nocturnos”, de los cuales el 72% trabajaban de día. El resto de las personas quedaron repartidas de manera uniforme entre madrugadores, o lo que los investigadores denominaron intermedios.
Las probabilidades de bajo rendimiento son el doble en las personas más nocturnas, incluso después de tener en cuenta variables influyentes, como la duración del sueño y el número de horas de trabajo matutinas, tal y como ha extraído del estudio la revista Occupational & Environmental Medicine.
“Reconocemos que estos hallazgos son nuevos y deben confirmarse en otros estudios. Sin embargo, nuestros resultados han sido obtenidos a partir de pruebas que demuestran que la noche está relacionada con una peor salud y funcionamiento”, señalan los autores del estudio, el Dr. Tapio Räihä y Leena Ala-Mursula.
De hecho, la profesora asociada de la Bishop’s University en Quebec (Canadá), Suzanne Hood, aconseja a las personas nocturnas que no se alarmen ante las evidencias que ha arrojado el estudio finlandés.
