Por regla general, no se asocia el consumo de suplementos de ácido fólico a los hombres, sino a las mujeres en edad fértil, sobre todo si sienten deseos de tener hijos. Pero no hay que olvidarse de la importancia que tienen las vitaminas para el organismo de todos los seres humanos.
La vitamina B9 o ácido fólico es hidrosoluble, es decir que se diluye en medios líquidos y es necesaria para la formación de nuevas células. ¿Tiene efecto en los varones, también? Veamos.
Beneficios del ácido fólico en los hombres
La importancia de ingerir ácido fólico en la dieta de una mujer en edad fértil es clara, ya que la ciencia ha demostrado que los niveles adecuados de la vitamina en el cuerpo femenino previenen defectos en el feto. Los suplementos indicados a las embarazadas o a quienes tienen deseos de estarlo, mejoraron el pronóstico de las malformaciones del tubo neural en todo el mundo.
Pero no debemos olvidar que el hombre, aunque no pueda gestar un bebé, debe formar parte del proceso. Lo hace aportando la mitad del ADN, a partir de una célula específica: el espermatozoide.
Si en el desarrollo celular del mismo ocurre un error, debido por ejemplo al déficit de vitamina B9, el ADN masculino será defectuoso. Esto podría derivar en malformaciones congénitas del feto, no ya por una carencia materna, sino por la genética.
Además de los beneficios que otorgan las funciones del ácido fólico ya nombradas, tanto para mujeres como para hombres, existen otros, como la protección ante enfermedades cardiovasculares, la prevención de la caída del cabello o aparición de canas y el mantenimiento de la energía vital.
¿Qué pasa si falta ácido fólico en un hombre?
Como nutriente esencial, los beneficios del ácido fólico en los hombres aparecen cuando los niveles están en sus valores adecuados. Para esta vitamina se estipula que debemos tener entre 2,7 y 17 nmol/l.
En caso de haber una carencia o deficiencia, ya sea por mala absorción o por una ingesta pobre de alimentos que lo contienen, los problemas que aparecerán en el hombre serán los siguientes:
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Anemia: debido al descenso en la formación y crecimiento de los glóbulos rojos. Los hombres anémicos tienen debilidad muscular y falta de energía, así como piel pálida. También cambia el ánimo por la falta de una correcta oxigenación, por lo que no es inusual que uno de los signos sea la irritabilidad aumentada.
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Diarrea: en este caso no queda claro si el síntoma es por el nutriente en sí que falta o como una asociación entre un síndrome de mala absorción y la poca incorporación de ácido fólico.
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Úlceras y llagas: tanto en la boca como en el aparato digestivo de los hombres, al dañarse las células intestinales y disminuirse la protección proteica que el ácido fólico otorga ante los ácidos estomacales, aparecen lesiones.
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Debilitamiento o pérdida del cabello: al estar formado por proteínas, la carencia de ácido fólico provoca que se dañe el folículo piloso.
¿Los suplementos de ácido fólico en hombres implican riesgo?
Siempre que adquirimos nutrientes de manera natural en la dieta, resulta de protección para multitud de enfermedades. Sin embargo, la toma de suplementos no controlada puede afectar de manera negativa la salud.
Estudios recientes han comprobado que tomar ácido fólico desde los alimentos reduce, en gran medida, el riesgo de sufrir cáncer de próstata. Pero, por el contrario, los suplementos adicionales aumentan la probabilidad de esta patología oncológica masculina.
¿Qué recordar sobre esta vitamina en los hombres?
Como cualquier otra sustancia necesaria, el ácido fólico resulta beneficioso de múltiples formas para mantener el desarrollo normal, tanto en mujeres como en hombres. La vitamina B9 regula el metabolismo de los glóbulos rojos, la replicación del ADN y la transmisión neuronal vinculada a los estados de ánimo.
A la hora de elegir cómo obtener este nutriente, se debe consultar con profesionales sanitarios. Siempre será mejor que la dieta equilibrada lo aporte en cantidades necesarias. El suplemento debe reservarse, entre los varones, para casos puntuales de deficiencias comprobadas.
Información general
Funciones del ácido fólico
El ácido fólico es un nutriente esencial para la vida celular, permitiendo el desarrollo y crecimiento de nuestros tejidos, siempre ayudado de otras sustancias o vitaminas que colaboran en el proceso. Las funciones principales son las siguientes:
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Creación y crecimiento celular: es un elemento fundamental en la formación de glóbulos rojos. Se suele prescribir, inclusive, para la prevención de las anemias.
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Descomponer y formar nuevas proteínas, junto con otras vitaminas como la B12 o la vitamina C.
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Ayudar en la formación de ADN: el ácido desoxirribonucleico es la unidad funcional encargada de transportar la información genética. El ácido fólico juega un rol clave en la transcripción y participa en el metabolismo de los núcleos celulares. De hecho, parte de las indicaciones que se hacen del nutriente para la prevención de los defectos congénitos, se basan en este aspecto.
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Desarrollo de células sexuales.
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Regulación del ánimo: varios estudios afirman la relación del ácido fólico con la disminución de problemas psiquiátricos y neurológicos, como la depresión o el Alzhéimer.
¿De qué manera se obtiene esta vitamina?
Por fortuna, la obtención de la vitamina B9 puede realizarse con una dieta variada y ni siquiera específica para ello. Incluso, existen suplementos alimenticios que ayudan a mantener o aumentar los niveles séricos de ácido fólico.
Los alimentos que más contienen esta vitamina son los siguientes:
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Verduras y hortalizas de hoja verde.
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Legumbres.
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Frutas, sobre todo cítricas.