Hablemos de si es sano o no dejar el maquillaje o depender de él para nuestro bienestar y no tener una visión auténtica de nosotras mismas
Leyendo una entrevista a Victoria Beckham, descubro que su marido nunca la ha visto sin sus cejas reales o sin maquillar y que rara vez sale a la calle sin una gota de maquillaje. No deja de ser objeto de debate en la redacción en la que hay compañeras que se niegan a renunciar a él y otras que optan por ir a carla lavada. He aquí una historia real de si es sano o no depender del maquillaje, tener esa visión no real o real de nosotras mismas y de cuáles son los límites. Lo comentaba un día con la actriz Rossy de Palma en una entrevista para TELVA y en la que le preguntaba si saldría a la calle sin maquillaje y me contestó con rotundidad que “qué necesidad”. Y hasta yo misma como editora de belleza me siento desnuda sin nada puesto sobre la piel y me cuesta aceptar mi rostro al natural.
Lo que te dice tu mente cuando dejas de usar maquillaje
Dicen psicoterapeutas como Jennifer Pepper, que cuando nos maquillamos “enviamos un mensaje a nuestro subconsciente de que tenemos defectos y que esos defectos deben taparse u ocultarse”. Y por contra, un estudio de 2016 presentado en la Asociación Estadounidense de Psicología que pidió a las mujeres que se miraran al espejo diariamente durante dos semanas sin maquillaje y concluyó que “se volvieron más seguras y compasivas de sí mismas disminuyendo su angustia”. La cuestión es que sin maquillaje estamos redefiniendo también nuestra idea de belleza. Y dar a la piel un descanso del mismo es algo que seduce a más de una, entre ellas a Elsa Pataky, que ha manifestado que en la gran mayoría de las ocasiones sale a la calle sin maquillar haciendo gala de su belleza natural pero cuidando su piel con atención.
Maquillarse o no, esa es la cuestión
Varios expertos nos desvelan un poco más de luz acerca de esta tendencia que tiene como dos vertientes: aquellas que deciden prescindir del maquillaje y las que no. Entre las primeras, nos viene a la cabeza, Pamela Anderson, quien lleva ya meses presentándose en actos públicos con la cara lavada (una de las razones más poderosas es el fallecimiento de su maquilladora de confianza). Y ahora además, protagoniza la nueva campaña de Proenza Schouler. Desde la Paris Fashion Week cada una de sus apariciones se han hecho virales reconociendo a propósito de su nueva imagen “que todas podemos tener una apariencia extraña sin maquillaje y al envejecer pero me río de mi misma, me miro al espejo y es todo un viaje”, ha manifestado ante los medios.
La tendencia al alza de salir a la calle sin maquillaje
Cada vez más, un gran número de mujeres salen a la calle sin maquillaje apenas. Y es que, del mismo modo que cada vez más mujeres han buscado la comodidad a la hora de vestir actualmente llevando sneakers, mocasines o bailarinas y no tacones, este efecto ha llegado al rostro. Esto tiene distintos significados sociológicos y psicológicos. “Aunque los tacones, maquillarnos o pintarnos los labios rojos pueden ser una forma de empoderamiento o de exacerbar la feminidad, también de lo contrario, de la evolución de la mujer y del feminismo paralelos a la entrada en el mundo laboral y la repulsa a la cosificación que ha conducido a las mujeres a reencontrarse con sus cuerpos y sus defectos, a abrazar la diferencia, las singularidades de su apariencia y al body positive“, nos cuenta el psicólogo Ángel Luis Guillén, terapeuta de Psicopartner.
Objetivo: sentirte cómoda
Es evidente que cuando te maquillas, la intención es verte mejor. Y una de las cosas que hace el maquillaje es subir la autoestima, siempre y cuando te sientas cómoda con él. Además, según el experto, el maquillaje puede camuflar una situación personal por la que estás pasando, “unos labios rojos son el mejor aliado de muchas mujeres en días tristes para aparentar todo lo contrario”. Pero de igual forma es una declaración de intenciones el optar por no maquillarse. “Puede que te sientas más cómoda con la cara lavada porque no te guste aparentar o que se vea algo que no eres” apunta el maquillador José López. Es aquí donde la belleza real tiene cada vez más peso o que no nos importe lo que puedan pensar los demás si vamos tal cual somos.
Momento de autocuidado
El maquillarnos como cuidar nuestra piel sin un ápice de color se convierte en un momento de autocuidado. Y esto lo dejaba también muy claro la también maquilladora Marta Arce, “no tiene por qué ser siempre de la misma forma ya que no todos los días son iguales. Nada como elegir aquel momento en el que te encuentres cómoda y te apetezca estar contigo misma para maquillarte o cuidar tu piel sin él”.
Según el informe anual sobre productos de belleza y cuidado personal elaborado por Klarna, la red global de pagos y asistentes de compras impulsada por IA, también ha examinado las tendencias entre los compradores de España, Italia, Alemania, Francia y Reino Unido y sin duda, la belleza está ligada a la idea de bienestar, como también el maquillaje. “Es maravilloso ver cómo el maquillaje se está convirtiendo en una extensión del cuidado personal, brindándonos beneficios a largo plazo”, explicaba el maquillador Lewis Amarante. Por eso, también está en auge el predominio de looks más naturales o los tan virales clean makeup looks que se centran en conseguir una piel más radiante y luminosa.
Una decisión muy personal
Como apunta la maquilladora Natalia Belda, si no nos apetece maquillarnos o salir a la calle sin maquillaje no pasa nada y “habría que manejar esa situación sin que nos sintamos inseguras por no llevar maquillaje o podamos vernos distintas. Deberíamos hacer aquello que nos haga sentir bien porque al fin y al cabo elegir una u otra opción es una cuestión muy personal”. Y en definitiva, no sentirnos esclavas del maquillaje o mal por no maquillarnos “porque estaremos igual de estupendas y nos aceptaremos cómo somos”, concluye Belda.
Fuente: telva.com