Los arqueólogos han encontrado evidencias de que en el antiguo Egipto era costumbre que las mujeres casadas llevaran un aro circular de oro en el dedo anular de la mano izquierda como símbolo de compromiso y pertenencia a su esposo. Los romanos se apropiaron también de esta tradición y el anillo que llevaban las esposas era de hierro, y representaba ante la sociedad el respeto y compromiso hacia la unión en matrimonio.
¿Por qué el aro tenía forma circular y se usaba en el dedo anular de la mano izquierda?
Tanto para los egipcios como para los romanos el círculo significaba eternidad, pues es una forma que no tiene principio ni fin, y esto era lo que esperaban de su matrimonio. Por otro lado, una antigua creencia, escrita por los autores romanos Aulus, Gellius y Macrobius, narra que la vena “amoris” lleva sangre directamente desde el corazón hasta el cuarto dedo (el anular) de la mano izquierda, por lo que, usando el anillo de matrimonio en ese dedo, siempre estaría conectado al corazón.
Otra explicación de por qué el anillo va en el dedo anular
Una teoría originada en China explica que cada uno de los dedos de la mano representa un vínculo. Así pues, los pulgares representan a los padres, los índices a los hermanos, los dedos del corazón nos representan a nosotros mismo, los anulares a la pareja y los meñiques a los hijos.
El anillo se debe usar entonces en ese dedo para que la pareja nunca se separe y su amor dure por siempre.
¿Qué pasó en la Edad Media?
También fue durante la edad media que los anillos matrimoniales empezaron a incluir piedras preciosas y palabras o mensajes grabados en el metal. Estos nuevos anillos simbolizaban la unión entre la fortaleza y cualidad inquebrantable de las piedras con la eternidad del aro, para representar un matrimonio “más fuerte que la muerte”, y adicionalmente tenían inscripciones que primero fueron fragmentos de poemas y luego eran palabras o frases que simbolizaban la pertenencia a una persona en específico; estos mensajes se grababan por dentro y por fuera de los anillos.
En 1477, el Archiduque Maximiliano de Austria mandó a fabricar el primer anillo de compromiso para su prometida María de Borgoña, un anillo de oro con varios diamantes dispuestos en forma de “M” que era la inicial de ambos nombres; esto hizo que el anillo con diamantes se volviera el favorito de compromiso de toda la aristocracia europea y aquí es donde surge la tradición de entregar un anillo previamente a la boda, y de que el anillo con diamantes sea el más elegido para esto.
El anillo de compromiso se ponía en la mano izquierda, luego en el matrimonio, cuando se entregaba la argolla, se ponía en el mismo dedo, junto al de compromiso.
Por poco se pierde la tradición del Diamante
Sin embargo, en 1947, recién terminada la Segunda Guerra Mundial, la casa joyera inglesa De Beers, cuya especialidad habían sido y son los diamantes, altamente preocupada por la baja demanda de esta piedra preciosa lanza una campaña de mercadeo donde usa el slogan “un diamante es para siempre”. Fue tan exitosa que los novios volvieron a comprar anillos de compromiso con diamantes para sus futuras esposas, y la tradición fue reestablecida.
¿Y el anillo de los hombres?
A lo largo de la historia, los hombres también han usado anillos para múltiples propósitos, desde la ornamentación hasta la representación de poder o estatus. En la antigüedad los hombres entregaban sus anillos a personas con las que hacían pactos y cerraban contratos como símbolo de su compromiso a cumplirlos; tal vez de aquí haya surgido que los egipcios le regalasen anillos a sus esposas, después de todo muchos matrimonios se arreglaban por conveniencia y resultaban siendo meramente contratos.
Se cree que, adicionalmente a todo lo que hemos mencionado, otra razón por la que los anillos de bodas solo eran usados por mujeres era que estos representaban la propiedad que sus esposos tenían sobre ellas; así que, cuando comenzaron los movimientos feministas en esta década, surgió el intercambio de anillos en el matrimonio como muestra de igualdad y de pertenencia del uno al otro, y desde esto es una costumbre generalizada
¿Por qué usamos el anillo de matrimonio en la mano izquierda?
Si prestaste atención a esta historia, recordarás que desde la antigüedad la argolla de matrimonio y el anillo de compromiso se usan en el dedo anular de la mano izquierda; si bien las mujeres usan su anillo de compromiso en la mano izquierda, cuando se casan unen este con la argolla de matrimonio y usan ambos en la mano derecha.
En México y Estados Unidos usan ambos anillos en la mano izquierda, en algunos países de tradición anglosajona llevan el anillo de compromiso en la derecha y el de matrimonio en la izquierda, y en otros el hombre lleva la argolla en una mano y la mujer en otra.
La tradición de la mano izquierda se ha perdido porque se descubrió que la tal vena “amoris” no existe realmente, y porque existe una teoría en la tradición católica que cree que la mano izquierda está relacionada con el diablo, pues la palabra “izquierda” en latín significa “siniestro”, mientras que la mano derecha, por su parte, significa destreza y simboliza el bien.