Si algo tienen en común la mayoría de las personas es que no les gustan que les mientan, pero todas lo hacen de algún modo habitualmente.
Existen muchas ocasiones en las que decir la verdad puede llegar a ser ofensivo, por lo que se tiende a ocultar la verdad o decir mentiras piadosas.
Sin embargo, en muchas otras sí que te gustaría saber qué es lo que realmente piensa la otra persona, pero no sabes cómo pillar esas mentiras.
Estas son algunas de las mentiras más habituales que se dicen en las consultas de los médicos
La doctora Lillian Glass explica que lo más importante es fijarse en el lenguaje corporal, como los gestos, la mirada e incluso las expresiones.
A continuación tienes 10 claves para detectar a un mentiroso, según publica.
1. La sonrisa del éxito
Muchas veces, cuando alguien está contando una mentira y ve que la otra persona se la ha creído por completo, es inevitable que le salga una sonrisa involuntaria, sin aparente motivo.
2. Hacer gestos de duda con el cuerpo
Por muy convincentes que sean tus palabras, si tu cuerpo dice lo contrario, no conseguirás decir una mentira realista.
Los gestos de duda o nerviosismo con el cuerpo son determinantes a la hora de detectar mentiras.
De toda la vida, para coger a un mentiroso basta con ver si te aguanta la mirada, y es que es muy complicado mirar a los ojos a otra persona y mentir.
Este es un truco muy práctico y fácil de aplicar, ya que la culpa se refleja en su mirada.
4. No ir al grano
Muchas personas no son capaces de mentir y prepararse una buena historia que les respalde, por lo que tienden a irse por las ramas, con palabras complicadas y una historia larguísima sin mucho sentido.
5. Medir las palabras minuciosamente para no equivocarse
Después existe otro tipo de mentiroso que es aquel que se ha preparado hasta el último detalle para que nada salga mal.
Este tipo de personas se sabe a la perfección su historia, tiende a no salirse del guion, por lo que si intentas desconcertarle, no tendrá escapatoria alguna.
También existe el truco de usar muletillas, como “del tipo” o “casi”. Aunque se suelan usar a menudo, pueden llegar a ser un indicio de que alguien miente, ya que su información es bastante inconsistente.
Las muletillas son un recurso muy utilizado cuando quieres complacer a otra persona, pero no sabes realmente de lo que está hablando.
7. Repetición de frases por nerviosismo
Cuando mientes puedes ponerte nervioso, y si te pones nervioso puede que empieces a repetir frases y no seas capaz de sostener la mentira por mucho tiempo.
8. Distanciamiento
Muchos mentirosos tienden a contar sus historias de forma impersonal, ya que así se quitan el sentimiento de culpa.
Además, otra característica muy común es omitir nombres, para que sea más complicado contrastar los hechos.
Las mentiras, por lo general, suelen estar muy estudiadas, sobre todo si se trata de algo importante.
Si quieres pillar a alguien con las manos en la masa, intenta desconcertarle alterando el orden cronológico de la historia, ya que probablemente se la haya aprendido de memoria.
10. Parecer demasiado artificial
Hay veces en las que un mentiroso acaba creyéndose su propia mentira. Es probable que te cuente la historia con tan lujo de detalles y con tanta fantasía que sea difícil aceptarla como verdad.
fuente: www.businessinsider.es