“Al dar revuelo exacerbado y ‘condenar de entrada’ como víctima a quien ha sido objeto de bullying se genera una doble victimización que en muchas ocasiones suele ser mucho más negativo para los involucrados”, señaló el psicólogo Ramón Rodríguez.

En la mayoría de los casos, el primer efecto que se genera cuando se habla de que algún alumno pudiera estar sufriendo bullying es tratarlo como víctima, lo que resulta problemático al intentar resolver el problema desde la perspectiva de la psicología.

“Antes que cualquier cosa, ya es víctima y eso es problemático a la hora de tratar de resolver el asunto… Al comportarse como víctima, lo único que genera es alimentar ese círculo que hace cada vez peor y peor ese encuentro entre víctima y victimario”.

EN DEFENSA DEL MÁS DÉBIL

Ante esto, el psicólogo pone énfasis en que además del acoso físico y/o psicológico al que se ven sometidos quienes sufren acoso escolar, la exposición de dichos casos a grandes públicos y el tratamiento que se le da a este tipo de violencia “como si en verdad fuese el peor de los asesinatos”, generan un doble efecto.

“Por un lado le das cierto aliciente al abusón, pero por otro lado condenas de entrada, de inicio, como víctima a aquel que sufre bullying, y la doble victimización es lo que suele ser más negativo”, anota.

Así, para el psicólogo, vivimos un momento en la sociedad donde, en aras de salvaguardar a los más débiles, las autoridades e instancias que tratan estos casos (háblese de padres de familia, escuelas, instituciones y medios) sí logran salvaguardar algunos aspectos de la persona pero al costo de convertirse, al mismo tiempo, también en verdugos del afectado.

EL PAPEL DE LOS MEDIOS

Un elemento nodal para entender el bullying es el papel que juegan los medios de comunicación al darle un revuelo exacerbado a estos casos, pues para el psicólogo el fenómeno tiene su auge precisamente junto al surgimiento de los nuevos medios y redes sociales como Youtube y Facebook, “particularmente a través de los dispositivos móviles”.

Así, si bien no son causa o generadores de acoso, estos medios han hecho los casos de bullying mucho más visibles y han facilitado que estos trasciendan las fronteras de la escuela y a veces incluso de una ciudad. Y para el psicólogo ahí, en su exposición, es donde se encuentra uno de los elementos no tomados en cuenta y en ocasiones muy perjudiciales del acoso escolar.

“La forma en que el bullying tiene el efecto perjudicial es también la forma en que se le da una especie de revuelo muy distinto, pues vivimos en un momento de la sociedad donde cualquier acto de violencia, cualquier acto agresivo se toma de una manera muy sensible”, puntualizó.

“Una cosa muy importante es darse cuenta de cómo es tomado por el público este fenómeno del bullying”.

Puede entenderse por doble victimización al sentimiento negativo que aparece ligado a la repetición de la información emocionalmente dolorosa, la falta de empatía y sensibilidad para quienes han sido víctimas de violencia, que provocan la sensación de ser nuevamente víctimas. Para prevenir esta doble victimización se deben reducir al mínimo las molestias derivadas de las intervenciones de diferentes profesionales e instituciones.