La Universidad de Sonora desde su fundación, ha tenido grandes avances en los procesos administrativos y se ha adecuado al mundo que estamos viviendo, aseguró Andrea Zavala Reyna durante su participación en el cuarto encuentro virtual “La Universidad Latinoamericana frente al postpandemia, como una oportunidad de transformación.
En este encuentro, enmarcado en la Cátedra Internacional: Pensar en América Latina frente a los objetivos del desarrollo sostenible (ODS) Agenda 2030, la subdirectora de Servicios Escolares habló de las estrategias adoptadas por la dependencia universitaria frente al proceso de confinamiento y medidas restrictivas derivadas de la pandemia por covid-19.
“La pandemia nos presentó una oportunidad en la que capitalizamos el conocimiento para una transformación”, expresó al señalar que se hicieron algunos ajustes para atender y cumplir los compromisos que, en este caso, corresponden a la parte administrativa de la institución que es esencial para que la Universidad cumpla con sus funciones sustantivas como son la docencia, la investigación y la educación.
Zavala Reyna estableció que la Dirección de Servicios Escolares tiene un compromiso y por ello, la pandemia le permitió establecer canales de comunicación con el sector académico y el sector social para cumplir con sus necesidades.
Durante su exposición, misma que se realizó vía plataformas y redes sociales, la funcionaria universitaria dijo que, desde un principio del confinamiento ordenado por las autoridades, la exigencia de los estudiantes obligó a la Dirección a atenderlos, primero desde casa, y luego desde las instalaciones universitarias.
“La naturaleza de las funciones de la Dirección nos obliga a estar presentes en todo momento del paso de los aspirantes por la universidad desde que los muchachos ingresan, cuando son alumnos y una vez que egresan”, expresó.
Explicó que las oportunidades para cambiar, para transformar la forma de brindar los servicios se vieron desde un principio, pues, cuando se dio la orden para el confinamiento, estaba el proceso de nuevo ingreso, el proceso de admisión.
Dijo que año con año, esta parte inicia con una convocatoria en la que se marcan las fechas y el protocolo a seguir para atender a los estudiantes de preparatoria interesados en entrar a la Universidad.
“La convocatoria fue presentada durante el mes de marzo y se tenían muy bien definidas las fechas en que se iban a presentar los alumnos, en que se aplicaría el examen y lo demás, pero con la pandemia, el primer obstáculo era que la entrega de documentos no podía ser de manera presencial”, detalló.
Dijo que el primer reto fue la recepción de documentos logrando adaptar el proceso que se realiza en línea para que ellos pudieran ingresar los papeles desde su portal. “Fue muy mecánico, explicar a los muchachos que no tenían que venir y luego, la revisión de al menos 14 mil expedientes de los aspirantes”.
El siguiente obstáculo, añadió, fue el examen, pues se tuvo que buscar las opciones para resolver que los muchachos pudieran hacerlo todos en un mismo día. “Fue otra tarea titánica porque se tuvo que capacitar a los alumnos de preparatoria en este sistema llevándoles tutoriales y capacitando al personal para tener una mesa de ayuda”.
Andrea Guadalupe Zavala Reyna comentó que, a la par de atender los pormenores de la convocatoria, la dependencia a su cargo tenía que atender al grueso de la población universitaria, más de 30 mil estudiantes, que también demandan otros servicios “Antes de la pandemia, los universitarios también asistían personalmente a las ventanillas de la Dirección de Servicios Escolares y, cuando en marzo nos dijeron que había que confinarse, los jóvenes comenzaron a verse desesperados por los trámites de sus documentos oficiales.
“Fue una tarea exhaustiva porque había que recibir la solicitud, generar el documento, digitalizarlo y luego, tener un proceso de control, y por ello se trabajó en un proceso para la generación de documentos a través del portal”, señaló luego de señalar que, de agosto de 2020 a la fecha se han generado más de 30 mil documentos con este sistema.
La subdirectora de Servicios Escolares dijo que también se presentaron problemas similares con la atención a los egresados y se atendió también el rubro relacionado con la comunicación de docente-alumno, alumno-docente.
“Esta cátedra está enfocada a la parte que estamos haciendo como instituciones para contribuir a que se cumplan los objetivos del saber sostenible dentro de la Agenda 2030 y, aunque es muy cierto que la universidad fue creada para cumplir con las funciones sustantivas de docencia, investigación y educación, debemos ver que existe la parte administrativa donde tenemos el compromiso de cumplir con esos lineamientos para garantizar la educación integral para todos”, apuntó.
En esta Cátedra Internacional: Pensar en América Latina frente a los objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030, participan la Universidad de Sonora, la Universidad Cooperativa de Colombia, la Universidad Regional Do Noroeste Do Estado Do Río Grande Do Sul-UNIJUI, de Brasil, y la Universidad Politécnica Estatal del Carchi-UPEC, Ecuador.