Las mujeres embarazadas tienen de 3 a 4 veces mayor riesgo de complicaciones por COVID-19 respecto de las no embarazadas, por lo que se les llama a acudir a vacunarse contra el virus a partir de que tengan 9 semanas de gestación y con 18 años cumplidos, indicó Enrique Clausen Iberri.
El secretario de Salud Sonora informó que las embarazadas de la entidad serán vacunadas a la par del grupo de edad de 50 a 59 años, siendo en Guaymas su aplicación el próximo 18 de mayo; las vacunas, dijo, están indicadas a partir de las 9 semanas de embarazo, por lo que se les pide acudir conforme llegue el proceso a cada municipio.
“La vacunación contra el Coronavirus tiene entre 65-90% de efectividad en prevenir casos sintomáticos o severos, por eso la importancia de que las mujeres embarazadas sin alguna contraindicación por su médico tratante, reciban la vacuna contra dicho virus para protegerse y proteger a sus bebés”, declaró.
Clausen Iberri puntualizó que en Sonora se tiene registro de 495 embarazadas que han sido contagiadas de COVID-19, cuatro de las cuales lamentablemente fallecieron; Hermosillo es el municipio que encabeza los casos de contagio con 190, seguido por Cajeme 68, Nogales 52 y San Luis Río Colorado 41.
El titular de la dependencia estatal apuntó que la Federación Mexicana de Colegios de Ginecología y Obstetricia y autoridades de Salud recomiendan la vacunación contra COVID-19 en mujeres embarazadas ya que no se han demostrado efectos adversos importantes en este grupo en otros países y que se ha demostrado que los beneficios superan cualquier posible riesgo.
Mencionó que el riesgo de complicaciones y muerte al contraer el virus, aumenta significativamente con factores como edad de la mujer embarazada, presencia de comorbilidades como diabetes o hipertensión, especialmente en el segundo y tercer trimestre del embarazo y puerperio.
El funcionario estatal comentó que las recomendaciones previas a la vacunación en embarazadas es informar a su médico tratante sobre la intención de vacunarse y la posibilidad de ser alérgica a los componentes de la vacuna y estar alerta a cualquier señal de alarma como fiebre, náuseas, para acudir urgentemente a su doctor.
Clausen Iberri explicó que quienes son alérgicos a Polietilenglicol (Pfizer), Polisorbato 80 (AstraZeneca y Sputnik) o antecedente de alergia grave (Anafilaxia), antes de vacunarse contra el COVID-19 se deben tomar en cuenta situaciones especiales como acudir, previo a su aplicación, al médico o alergólogo.
Los efectos secundarios de la vacunación más comúnmente reportados, agregó, son dolor en la zona de la inyección, cansancio, dolor de cabeza, escalofríos o fiebre, dolor muscular y que estos pueden suceder también en las mujeres embarazadas como en cualquier grupo de población; si se presentan síntomas persistentes o graves hasta 30 días después se debe acudir al médico.
De igual manera, explicó, se recomienda reprogramar la aplicación de la vacuna en caso de presentar fiebre de 38°C o mayor, trastornos hemorrágicos, menos de 14 días de aplicación de otra vacuna como influenza, personas con menos de 14 días de haber padecido COVID-19.
Posterior a la vacunación, se recomienda continuar con medidas de prevención, como lavado de manos frecuente, sana distancia y uso de cubrebocas, así como vigilar la presentación de efectos secundarios y solicitar atención médica en caso de síntomas como fiebre, dolor de cabeza intenso, zumbido de oídos, visión borrosa, dolor abdominal, salida de líquido o sangre por la vagina, dejar de percibir movimientos del bebé.