Rebecca , te escribo a ti porque eres la más pequeña de la familia en la generación que ha llegado después de la mía.
Pese a tu corta edad, tu capacidad intelectual y tu actitud personal, nos ha demostrado tantos alcances que muchas veces nos han sorprendido.
Y con esos atributos se que sabes que algo está pasando con las mujeres en tu pais.
Has escuchado nuestras platicas en familia y has leido las conversaciones en el chat.
Te has dado cuenta que a veces con reservas y otras de manera abierta hemos hablado de las condiciones de las mujeres y los últimos días, del paro del lunes 9 de marzo.
Ese tema seguramente lo has escuchado también en la escuela, con tus amigos y con los vecinos.
Quizá cuando escuchas la referencia a violencia familiar, feminicidios, desapariciones, acoso, etc; te suenen lejanos. Pero ojo, eso no quiere decir que no existan y que muchas familias y especialmente las mujeres en tú país, en nuestro país, sufren por ello.
A mi generación Rebecca, le ha tocado vivir en un ambiente de mayor inclusión donde las mujeres que nos antecedieron lograron cambiar muchas cosas, empezando por las leyes que limitaban a nuestro género el derecho de votar para elegir a sus gobernantes, solo por citarte uno de muchos ejemplos.
Pero ¿Sabes qué? Para lograr avanzar en la conquista de nuestros derechos, ha sido fundamental que las mujeres hagamos alianzas, nos apoyemos, nos impulsemos, nos defendamos, nos reconozcamos.
Así es como de generación en generación hemos logrado más respeto, más reconocimiento, más plenitud…
Algo que debes tener muy claro Rebecca, es que las mujeres que de alguna u otra manera nos manifestamos, no estamos en contra de los hombres; estamos en contra de los comportamientos, las costumbres e incluso las estructuras sociales que nos separan por generos en lugar de buscar considerarnos a todos y a todas como seres humanos.
Si tú, tus hermanas, tías, primas, tú mamá y abuela, tenemos una situación de privilegio o afortunada en el sentido que no vivimos violencia, déjame decirte que no es el caso de muchas mujeres mexicanas.
Debes saber Rebecca que habemos muchas mujeres decididas a sumarnos en contra de la violencia hacia nuestro género porque muchas mujeres por el hecho de serlo, viven violentadas todo el tiempo…algunas ya no viven porque han pasado a formar parte de la estadística del feminicidio en nuestro país.
Y mi generación, esa que antecede la tuya y que hoy está en posibilidades de movilizarse, de manifestarse, de rechazar la violencia, tenemos una responsabilidad con nuestro momento pero también con tu futuro.
Yo aspiro a que tu generación Rebecca, viva en un país más pacificado que el que actualmente existe; yo quiero que tu generación no aguante callada; no vea la violencia normalizada, no sienta miedo.
Quiero hacer algo en mi presente que hoy nos hace coincidir, para que estemos mejor y para que en los años por venir, las mujeres de tu generación vivan mejor y ejerzan a plenitud sus derechos… que puedan caminar por las calles sin miedo, que no aceptes comportamientos ni tratos por los que tu persona sienta rechazo, que no te condicionen, que no te vean indefensa, que no calles por temor ni que digas por obligación… que vivas en la libertad que las leyes te permitan y que incidas para instaurar en tu medio, la armonía necesaria y suficiente para ser tú y con ello hacer de tu época una era de mayor inclusión, respeto y amor.
Por eso Rebecca, estaremos manifestándonos pacíficamente (por lo menos así lo haremos mis amigas y yo), este sábado 7 y el domingo 8 de marzo… y el lunes, el lunes 9 de marzo participaremos en el paro nacional… ese día no nos haremos visibles para con nuestra ausencia demostrar el impacto que nuestra presencia hace en el día a día.
Con una mirada de agradecimiento a las generaciones de tus abuelos y abuelas, con profunda convicción de compromiso hacia mi generación y con mucho amor y esperanza en tu generación Rebecca, me voy a manifestar este fin de semana y estaré ausente el lunes 9.
Te ama, tu tía Sol.