Para los niños, el contacto con la naturaleza es importante porque estimula todos sus sentidos y los desafía a explorar. Muchos problemas sociales actuales, como la obesidad o la ansiedad, se deben en parte a que se ha perdido esta proximidad.
Lo más probable es que muchos niños que crecen ahora estarán desprovistos de tales recuerdos en el futuro, pero prestando un poco de atención a nuestro alrededor, los padres podemos brindarles a nuestros hijos la oportunidad de adquieran esos momentos inolvidables.
Por qué es importante
Estar al aire libre, jugar libremente y descubrir la naturaleza de una manera abierta ayuda a los niños a desarrollar sus sentidos, habilidades motoras, habilidades sociales y creatividad.
Muchos de nosotros tenemos buenos recuerdos de nuestra infancia al aire libre, y desde siempre la naturaleza para niños de preescolar hasta la secundaria ha jugado un papel importante. Atrapar renacuajos, construir chozas, o sentarse alrededor de una fogata con amigos son experiencias que nos han ayudado en nuestro desarrollo físico y cognitivo.
Los niños que juegan poco en la naturaleza tienen más probabilidades de tener sobrepeso y comer de forma poco saludable que los niños que juegan en la naturaleza y hacen suficiente ejercicio. También son más propensos a tener problemas de comportamiento y están más ansiosos que los niños que crecen en un entorno verde.
¿Por qué los niños son importantes para la naturaleza?
La naturaleza no solo es importante para los niños, sino al revés, los niños también son importantes para la naturaleza. Después de todo, las experiencias de la infancia conducen al respeto y la apreciación en la edad adulta.
El amor por la naturaleza a menudo se crea durante la infancia. Y esta semilla sembrada en la infancia probablemente haga que se preocupen por la naturaleza en la edad adulta.
La generación que está creciendo ahora tiene pocas experiencias en la naturaleza. Como resultado, estos niños luego elegirán no proteger la naturaleza y vivirán su vida con poca conciencia ambiental.
Poco contacto con la naturaleza
Las posibilidades de jugar en las ciudades se han reducido mucho. El espacio público en el que los niños pueden moverse libremente es cada vez menor.
Las familias a veces tienen una percepción demasiado estrecha de la naturaleza viendo la naturaleza tan solo en un gran bosque o reserva natural. No saben que la naturaleza también se puede encontrar en la ciudad. La naturaleza urbana puede ser menos espectacular, pero no por eso inferior. En la mayor parte de las ciudades hay parques de diferente tamaños donde los niños pueden disfrutar de una tarde en la naturaleza. Si vives en una ciudad puedes encontrar un lugar verde donde disfrutar con tus pequeños.
Vacas moradas y espinacas en cubitos
Algunos niños están tan influenciados por los medios, especialmente por la publicidad que carecen de una percepción objetiva sobre la flora y la fauna. Nos puede causar sorpresa y gracia, pero también hay niños que piensan que la leche proviene del supermercado y que las espinacas crecen en cubos a la crema.
El papel de la familia en el contacto con la naturaleza
Muchos niños salen de casa por la mañana para ir al colegio en auto o transporte público, y vuelven por la tarde por el mismo medio y a la hora de jugar lo hacen en casa, a menudo con los videojuegos o la computadora. Los padres llenan sus agendas de actividades para prepararles para el futuro, se preocupan por su seguridad, que estén en ambientes protegidos, que no se mojen, no se ensucien, no les piquen bichos pero no se acuerdan de darles un ratito de libertad para jugar y explorar la naturaleza.
Además de la escuela, la familia tiene una tarea importante en esto. Porque los padres pueden conectar a su hijo con la naturaleza desde una edad temprana. Hablando de la naturaleza, explorando y experimentando la naturaleza juntos.
Beneficios de la naturaleza para los niños
– Jugar en el bosque puede influir positivamente en las habilidades motoras de un niño
– Las funciones cognoscitivas de los niños que pasaron de un entorno pobre a uno rico en naturaleza mejoraron significativamente.
– En un entorno natural de juego es más creativo y variado.
– Los niños son aprendices activos, investigadores, y la naturaleza ofrece una experiencia sensorial completa, pueden tocar, oler, ver, oír, probar…
– La naturaleza ofrece una cantidad elevada de estímulos que el contacto con ella hace que el niño se encuentre en un espacio abierto, con sensación de libertad, con capacidad de moverse libremente, de observar los procesos que ocurren, y eso es fundamental para el desarrollo de sus habilidades de movimiento pero también un estímulo para sus neuronas, para sus emociones y para su aprendizaje.
– La naturaleza es muchas otras cosas, es belleza, es capacidad maravillarse y dejarse deslumbrar, pero sobre todo la naturaleza estimula los sentidos, sin sobre estimular al niño.
– Cuando salimos a diario a jugar con los niños en entornos naturales no hace falta tener que utilizar tan solo plastilinas o similares, la naturaleza les ofrece múltiples texturas para experimentar.
Actividades para niños en o con la naturaleza
Crear tu propio espacio de naturaleza
Puedes crear un jardín aunque no tengáis mucho espacio en casa, podéis simplemente reservar un espacio del hogar para tener unas cuantas macetas con diferentes plantas, poder cuidarlas y observar con se desarrollan. Los niños pueden aprender lo que las plantas necesitan para mantenerse saludables, y ver los frutos de su cuidado. Cuidar de las plantas siempre nos acerca a la naturaleza y a la tierra.
La tierra como experiencia sensorial
Los niños se sienten libres de mancharse y jugar suelen untarse el cuerpo con tierra y barro. Es una experiencia sensorial muy potente y que ofrece una textura distinta a la arena. Merece la pena dejar a los más pequeños probarlo.
Cerrar los ojos y redescubrir tu entorno
Siempre que puedas sal al bosque o a un parque tranquilo, probad a cerrar los ojos y tocar los diferentes elementos que encontréis, la corteza del árbol, las hojas húmedas, la tierra olorosa. Daros unos minutos para escuchar los pájaros, la brisa que mueve las ramas o simplemente, el silencio. Podéis jugar a cerrar los ojos y a través del tacto acertar de que elemento de la naturaleza se trata.
Una rica merienda al aire libre
Organizar una merienda en el parque o en el bosque puede ser una manera divertida de organizar un rato en la naturaleza y de paso practicar la organización, sabiendo que después de haber jugado y comido hay recoger todo para poder dejar el lugar limpio como lo encontramos cuando llegamos.
Piensa que vale la pena salir más a menudo al campo con los pequeños y naturalizar al máximo los espacios exteriores de los parques urbanos o del los bosques, con el fin de que todos los niños puedan disfrutar de las ventajas que tiene crecer en espacios al aire libre y en la naturaleza.
Fuente: www.tipsdemadre.com
Modelo: Julietta León Gil