Para celebrar el compromiso común de Francia y México en la lucha contra la violencia de las mujeres y niñas a través del derecho, se firmó el convenio La perspectiva de género aplicada a la defensa de los derechos de las mujeres víctimas de violencia, entre la Embajada de Francia en México, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la organización francesa Lawyers for Women y con la participación especial de la Universidad de Sonora y Universidad Autónoma de Chihuahua.
La ceremonia se realizó en formato virtual, y el documento fue signado por Jean-Pierre Asvazadourian, embajador de Francia en nuestro país; Patricia González Rodríguez, coordinadora del Seminario universitario interdisciplinario sobre seguridad ciudadana, de la UNAM; Michelle Daya, representante legal de Lawyers for Women; Enrique Fernando Velázquez Contreras, rector de la máxima casa de estudios de Sonora, y Raúl Sánchez Trillo, secretario general de la Universidad Autónoma de Chihuahua.
En el evento protocolario, el embajador Asvazadourian dijo que el acuerdo tiene como línea de trabajo la creación de clínicas jurídicas que permitirán orientar a las víctimas en sus procesos para obtener una reparación de daños y beneficiarse con consultas jurídicas gratuitas impartidas de forma voluntaria por estudiantes de Derecho y sus profesores, así como la realización de un diplomado académico de especialización en aspectos legales y penales de la violencia contra las mujeres, enfocado en la práctica e intercambio de conocimientos entre ambos países.
“Este intercambio, a pesar de la pandemia, ha avanzado a través de las fronteras y se tiene el gusto de inaugurar dos iniciativas muy concretas: primero, una red de clínicas jurídicas, sistema que se concentrará próximamente en una aplicación móvil y permitirá consolidar el proceso legal de las víctimas y al mismo tiempo contribuirá a la formación de estudiantes en situaciones reales; la segunda, un diplomado enfocado a la práctica e intercambio de conocimientos, con perspectiva de género aplicado y litigio en defensa de mujeres víctimas de violencia, y que capacitará a estudiantes de Derecho, Trabajo Social y a todos los que deseen adquirir conocimientos y habilidades concretas para una respuesta eficaz a la violencia contra la mujer”, explicó.
Abundó que desde el 2019 ambos países han trabajado de manera coordinada en la realización de seminarios de trabajos entre pares dedicados a la lucha en contra de la impunidad en materia de violencia de género; sin embargo, aseguró que el diplomado, a realizarse a partir del 9 de abril, será innovador, interdisciplinario y pionero entre México y Francia.
Este objetivo sigue siendo un gran reto que enfrenta nuestras sociedades en el siglo XXI, es un desafío que comparten todas las naciones, pues en México en corto tiempo diez mujeres mueren por violencia de género; mientras que en Francia, en el 2020, alrededor de 97 femeninas fueron asesinadas por sus parejas sentimentales, reveló.
“Demasiadas mujeres siguen siendo reacias a presentar una denuncia, temen a represalias y no tienen accesos a sus derechos como víctimas; en ocasiones reconocen sus derechos, se sienten culpables, no saben dónde acudir y temen no ser escuchadas; en este contexto es verdaderamente útil reflexionar si se ha hecho todo lo posible para erradicar y castigar la violencia de género en nuestros países”, subrayó Jean-Pierre Asvazadourian.
Por su parte, el rector de la Universidad de Sonora, Enrique Fernando Velázquez Contreras, expresó que es un honor para la institución ser integrante de este convenio de colaboración, y propuso una completa e indispensable tarea para garantizar una vida libre de violencia de género, a través del desarrollo de programas académicos y de investigación que aborden la defensa de niñas y mujeres víctimas de violencia de género y violencia intrafamiliar.
Aseguró que para lograr la igualdad es necesario que las mujeres en cada etapa de su vida accedan a la educación, atención médica, a un trabajo decente y puedan participar en los procesos de toma de decisiones políticas y económicas, y para cumplir con esto es urgente poner fin a todas las formas de discriminación contra las mujeres y niñas.
Aunque hay avances en materia de equidad, Velázquez Contreras reveló que según datos presentados por la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de la Relación en los Hogares, que público el Inegi, muestra que en el 2016 en México, el 66% de las mujeres ha sufrido violencia al menos una vez en su vida, y el 88% de ellas no se atrevió a denunciar o solicitar algún tipo de apoyo. “Estos datos indican que estamos muy lejos de erradicar la violencia de género en nuestro país”, sostuvo.
“Agradezco incluir a la Universidad de Sonora como miembro importante de la presente alianza estratégica, y reitero mi confianza en obtener resultados significativos a favor de erradicar la violencia de género”, apuntó.
De igual forma, Martha Delgado Peralta, subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores, subrayó que la prevención y eliminación de la violencia contra las mujeres son parte de la política que se lleva a cabo en la administración federal, y aseveró que la erradicación de este problema social significa un desafío significativo porque hay una complejidad en las prácticas arraigadas.
“Las mujeres y niñas que sufren violencia en alguna etapa de su vida tienen diversas manifestaciones: en los hogares, espacios públicos, escuela, trabajo, ciberespacio, en la política y diferentes instituciones; es una práctica que permea en todos los ámbitos de la vida, por tal motivo es relevante lograr una igualdad sustantiva entre hombres y mujeres”, recalcó.
Destacó que México atiende a dicho fenómeno social con los compromisos internacionales que se han asumido al paso de los años, y con base en estas responsabilidades se han desarrollado programas exitosos, como el Programa Nacional de Igualdad entre Hombres y Mujeres, que es el eje rector del gobierno en materia de promover una vida libre de violencia, y se han instalado mesas técnicas de acceso a la justicia para las femeninas que han perdido la vida por causa de la violencia.
Asimismo, el proyecto Mujeres construyendo paz permite reconstruir el tejido social por medio de redes de participación y la procuración de justicia a través de la Fiscalía Especial para los delitos de violencia contra las mujeres y trata de personas, que ha elaborado los primeros protocolos de investigación ministerial, policial y pericial con perspectiva de género para atender el delito de feminicidio y violencia sexual, enfatizó.