Las vitaminas juegan un papel fundamental en nuestra salud, por eso es importante llevar una alimentación balanceada que nos ayude a obtener todos los nutrientes que nuestro cuerpo necesita para funcionar correctamente. Sin embargo, con el paso de los años nuestras necesidades cambian, y es importante modificar hábitos para asegurarnos de recibir los elementos adecuados en cada etapa de la vida.
Este es el caso, por ejemplo, de la vitamina D, que toma un rol fundamental para personas mayores de 45 años.
La vitamina D ayuda al cuerpo a absorber calcio, para fomentar la salud de nuestros huesos y músculos. Además, la deficiencia de vitamina D se asocia con problemas cardiovasculares y diabetes. Esta vitamina se obtiene principalmente de la exposición al sol, sin embargo, con el paso de los años nuestro cuerpo va perdiendo la capacidad de producirla.
A partir de los 50 años, la capacidad de nuestro cuerpo para producir vitamina D disminuye en hasta un 50%, y después de los 70 años baja a un 25%.
¿De qué otra forma puedo obtener vitamina D?
Aunque sí se encuentra en algunos alimentos, en su mayoría pescados, que debemos incluir en nuestra dieta, la forma más sencilla de obtener los niveles de vitamina D que nuestro cuerpo necesita en esta etapa de la vida es por medio de suplementos.
En estos momentos es más importante que nunca considerar los suplementos de vitamina D como una opción, ya que debido a la pandemia por la que atravesamos muchas personas han permanecido en sus casas, sin exponerse al sol, y esto puede provocar una deficiencia. Un medicamento que aporte 4000 UI se considera una dosis segura y eficaz para corregir la deficiencia de vitamina D.
La vitamina D es esencial para la salud de nuestros huesos, ¡asegúrate de recibirla!