Seguramente habrás experimentado la agresión que presentan algunas personas que interactúan vía internet. esto podría tener una explicación desde la psicología.
Este artículo publicado por la revista Muy interesante expone lo que hace tiempo venimos viendo en internet, la hostilidad y agresividad que manifiestan las personas a través de la red.
Según indican los estudios, la falta de contacto visual con el interlocutor puede ser el desencadenante de dichos comportamientos. Sin embargo, consideramos que son en conjunto diversos los móviles por los cuales las personas muestran un comportamiento que la mayoría de las veces, es el opuesto al que tienen fuera de Internet.
La mayoría de las personas considera actuar de manera impulsiva e incluso de manera espontánea cuando interactúan con terceros, sin embargo el factor de ser aceptados en un grupo o darnos una identidad acorde al modelo que queremos aparentar en cierto ámbito, muchas veces puede ser el trampolín para actuar de manera automática, haciendo lo que el resto haría o considerando lo que el resto diría sin detenernos a ver cual es realmente nuestro punto de vista, independientemente de lo que el molde nos ofrece.
La mediocridad de la sociedad actual es uno de los mayores contaminantes en todo tipo de plataforma virtual.
Si vamos a cualquier foro o sala de conversación en línea, podremos constatar que las personas pueden ser más crueles en Internet que en la vida real.
Los psicólogos culpaban a la desinhibición, el anonimato e invisibilidad como los responsables de ese comportamiento en los usuarios: cuando alguien está conectado, nadie sabe quién es y cómo es en apariencia.
Ahora, un nuevo estudio publicado en Computers in Human Behavior (enlace), sugiere que más allá de cualquier cosa, las personas se vuelven bullies en Internet debido que no hacen, específicamente, contacto visual con sus receptores.
Investigadores de la Universidad de Haifa, Israel, pusieron a 71 parejas de estudiantes, donde ninguno conocía al otro, para hacerlos discutir sobre un tema en Instant Messenger, e intentar llegar a una solución apacible.
Cada par de estudiantes, sentados en habitaciones diferentes, chateó en varias condiciones: a algunos se les pidió que compartieran detalles personales sobre ellos, mientras que otros mantuvieron contacto visual constante con la ayuda de cámaras web en las computadoras.
Más que el anonimato o la invisibilidad, el que los sujetos puedan ver o no ver los ojos de su interlocutor es lo que define su comportamiento en línea. Cuando el contacto visual fue minimizado (escondido), los participantes del estudio doblaron sus tendencias hostiles.
Incluso si los sujetos eran irreconocibles al hacer un acercamiento para que se vieran únicamente sus ojos a través de la cámara, rara vez cometían alguna amenaza y hostigamiento si mantenían el contacto ocular.
Y aunque nadie sabe exactamente por qué el contacto visual es crucial, se notó que ver los ojos del compañero de conversación ayuda a entender los sentimientos de la otra persona, las señales que la persona está tratando de enviarte, dijo el coautor del estudio, Noam Lapidot-Lefler.