La reactivación económica, afrontar y resolver la crisis de la covid-19, impulso a las energías limpias, mejorar la política migratoria y una alentadora relación bilateral de cooperación con México, serán signos del nuevo gobierno de los Estados Unido, afirmaron académicos de la Universidad de Sonora.
Francisco Vargas Serrano, coordinador del programa académico de la Licenciatura en Finanzas adscrita al Departamento de Economía, señaló que con el presidente electo Joe Biden observa de manera muy positiva un mejor escenario macroeconómico y un crecimiento más equitativo, con fuerte impulso a las energías limpias.
Dijo que es de esperarse una mejora en la política migratoria, comparada con la de su antecesor. “Recordemos aquel signo ominoso de separar a los hijos de los padres de los migrantes atrapados sin saber su destino ni de su familia”, observó.
En cuanto al aspecto económico, Vargas Serrano señaló que el nuevo gobierno estadounidense aprobará un programa de fortalecimiento de la clase media, ampliará la cobertura del servicio médico, aumentará los impuestos a los más ricos e invertirá en la infraestructura de la energía verde.
En relación con la covid-19, indicó que se tiene información de que habrá una inyección fuerte de recursos de 1.9 trillones de dólares para apoyar a los afectados por el paro de la economía.
“Por todo ello, es de esperarse que haya un mejor desempeño de la economía del vecino país del norte y estimule la demanda de importaciones de productos del resto del mundo, lo cual beneficiaría a México.
Asimismo, dijo que el incremento del salario mínimo a 15 dólares la hora también habrá de impulsar la demanda de bienes y servicios de aquella economía y tendría un impacto similar.
“El impulso a las energías limpias deberá inducir al resto del mundo a alinearse en esta misma orientación, ya que se observará un cambio cualitativo en los modos de producción y consumo. Para ello, Biden invertirá en ello dos trillones de dólares durante su período gubernamental” comentó.
Por su parte, María Nelly Gutiérrez Arvizu, jefa del Departamento de Lenguas Extranjeras, aseguró que observa que con Biden las relaciones México-Estados Unidos se realizarán en un ambiente de cooperación y cordialidad, teniendo en mente el mayor beneficio para los dos pueblos.
Con respecto a la agenda de educación, considero que, una vez que las condiciones lo permitan, el intercambio académico y profesional se verá incentivado, especialmente a partir de la reciente firma del T-MEC.
Gutiérrez Arvizu sostuvo que la política de respeto entre las naciones de México y Estados Unidos que lleva el presidente López Obrador continuará dando buenos resultados ahora con el gobierno de Joe Biden.
“Las relaciones bilaterales deberán estar basadas en el respeto y la colaboración amistosa para que traigan consigo beneficios para ambas naciones”, puntualizó.
A su vez, Germán Palafox Moyers, profesor investigador del Departamento de Economía, planteó que Biden tiene una agenda de política económica muy diferente a la de Trump, y ahora tendrá que poner en práctica sus propuestas basado en tres factores: la composición final del Senado, que ya tiene mayoría demócrata; su capacidad para aprender de aciertos y fracasos del pasado y que la economía de los Estados Unidos pueda evitar un shock que le reste crecimiento.
“En lo relativo a ese último punto, la agenda vendrá acompañada de un plan de 1,9 billones de dólares para estimular la mayor economía del mundo, debilitada por la pandemia de covid-19”, afirmó.
Palafox Moyers apuntó que el primer punto del programa de Biden será la recuperación tras la pandemia y que, con varias vacunas a la vista, la tarea inmediata es tender un puente entre el presente y la economía poscrisis.
La pandemia, dijo, ha hecho estragos en la distribución de ingresos y riqueza, afectando con ello a los sectores más vulnerables del país vecino. Incluso, añadió, quienes pudieron contra las políticas de desalojos y ejecuciones hipotecarias están cada vez más endeudados, y puede ser que no resistan más tiempo.
Ante esta grave situación, recordó que Joe Biden ya anunció un ambicioso plan para reactivar la economía del país vecino y, por otro lado, buscar frenar el impacto de la pandemia, que se ha cobrado ya más de 300,000 vidas y que supera los 23,2 millones de casos en su territorio.
Germán Palafox informó que los últimos datos económicos de la nación vecina son alarmantes, ya que hay 18 millones de estadounidenses que aún dependen del subsidio de desempleo y unas 400,000 pequeñas empresas han cerrado.